Herramientas para un buen cumplimiento normativo
Las primeras normas internacionales que afectaron directamente a las responsabilidades de los Compliance Officers fueron la ISO 37001 de sistemas de gestión antisoborno y la ISO 19600 de sistemas de gestión de compliance, ambas publicadas el año 2014. Supuso un importante avance en la definición de las tareas y requisitos que debe cumplir el responsable del cumplimiento normativo.
Ahora, durante este año 2021, se publicarán nuevas normativas que también afectarán a la profesión de Compliance Officer, como:
- la ISO 37 301 de sistemas de gestión de compliance que, además de ser una norma certificable, amplía y mejora la anterior - esta norma ya ha sido publicada en el mes de abril.
- la ISO 37002 de sistemas de gestión de denuncias de irregularidades
- y la ISO 37000 de guía para la gobernanza de las organizaciones
Compliance significa cumplimiento de obligaciones. Obligaciones que pueden ser impuestas de forma externa (legislación, contratos...) o las que asume de forma voluntaria la organización. Por lo tanto, queda claro que una adecuada cultura corporativa genera confianza y aporta valor reputacional.
Un comportamiento ético, un desempeño eficaz y una administración responsable de las organizaciones nos lleva a alcanzar algunos de los objetivos de la agenda 2030 planteada por las Naciones Unidas. Y, para ayudarnos contamos con todas estas nuevas normas, que son un paso más en la gestión de compliance. Es decir, son un indicador de la importancia que tiene el cumplimiento normativo como base para cultivar la integridad de las personas, y no utilizarse, sólo, como herramienta de control o penalización.